Mi maleta pesa
24.900kg. Me da la impresión de haber tirado 5kg. a la basura, teniendo en
cuenta que podía haber facturado 30kg. Es curioso como una con la edad y la
experiencia viajística, aprende a ser práctica. Cuando fui a Londres llevé dos
maletas junto con la de mano y tuve que pagar sobrepeso, ahora me voy 10.000km.
más lejos, sólo llevo una maleta y la de mano, y aún así me sobran kilos...
Después de los
pertinentes lloros y abrazos con mis padres en el aeropuerto (jops..., se me sale el alma del cuerpo cuando veo a mi mami llorar tanto), me dirijo al la
puerta de embarque la D21. Subo al avión, mi plaza es la 49K de la sección C.
El avión es impresionantemente grande. Una que está acostumbrada a hacer uso de
los servicios de las compañías low cost, hoy me sentía como quien llega del
pueblo a la gran ciudad.
Me esperan casi 6
horas y media de vuelo así que me he traído conmigo mi ordenador, mi ipod y el
libro al que estoy súper enganchada: Jin Ping Mei, El erudito de las
carcajadas, literatura erótica china del siglo XVII y que estuvo prohibido
durante mucho tiempo.
Mi compañero de
viaje es un hombre de mediana edad, de origen italiano pero que se trasladó de
pequeño a Venezuela y que viaja por motivos de trabajo a Australia. Es
ingeniero de pozos petrolíferos y su empresa le ha enviado allí para los
próximos 3 años. Viajan él y su mujer. Mu amables!! Cuando llegamos a Dubai, me
desean suerte para mi futura experiencia coreana y nos separamos.
El aeropuerto de
Dubai es como un centro comercial. Es la 1am local y es increible como parece
los almacenes Harrods o su versión española El Corte Inglés el primer día de
rebajas.
Tengo que ir
directamente a la puerta de embarque que es la B29, tardo como mil años en
llegar a ella y por el camino me encuentro miles de tiendas duty free, y entre ellas una sala de
oración. Claro! estoy en un país musulmán, y de ahí, la razón de ser de los baños...
Los WC del aeropuerto de Dubai, son la versión High Standard de los baños que había en las casas de las familias saharauis en el desierto de Tindouf: un interminable agujero en el suelo. Lo más curioso de estos es que disponen de un grifo de ducha. Al principio pensé que sería el sustitutivo de la cadena del WC, al menos ese uso le di yo. Después, esperando a que se hiciera la hora del embarque, mis neuronas empezaron a atar cabos: país musulmán-cinco oraciones al día- ABLUCIONES!!! claro! las duchas son para que los usuarios musulmanes puedan purificarse antes del rezo!
Tras el descubrimiento, decido leer hasta que se hace la hora de embarcar en el vuelo con dirección a Corea.